Interesante velada

Hace tiempo, en un curso de inglés, nos propusieron una dinámica, un ejercicio..., como se quiera decir:

Teníamos que imaginarnos que podíamos reunir a 10? personas (no lo recuerdo exactamente) para celebrar una cena. Podíamos elegir las personas que quisiéramos, fueran o no de nuestro tiempo, sin ninguna limitación y con el fin que deseáramos. Una cena para poder hablar con quien quisiéramos y de lo que quisiéramos.

Después de dejarnos pensar unos minutos, expusimos nuestras preferencias, argumentos... ya se sabe, cualquier excusa es buena para hacernos hablar en inglés, o intentarlo al menos. Pues, tras esos minutos, creo recordar que algún/a compañero/a, se decantaba por reunir en su mesa, básicamente a gente del espectáculo, artistas, cineastas...; otr@, eligió formar una mesa compuesta por deportistas, entrenadores...; a mí no me hace falta mucho para soñar despierta, así que, me pareció una oportunidad que no podría desaprovechar, me planteé esas dos preguntas. ¿A quién elegiría? y, ¿con qué fin?

Hombre... ¡imagínate que tienes esa posibilidad! Sería una oportunidad única.

Para elegir a quiénes sentarías a tu mesa, creo que lo primero que debes decidir es el fin que persigues con la cena y siendo una oportunidad única debería ser un fin que estuviera a la altura, así que, yo pensé que lo que más me gustaría, lo que merecería la pena y me resultaría más interesante, sería una cena (la verdad es que no sé si habría comida de por medio o era una reunión... detalles que cada uno puede imaginar según le parezca) el caso, sería una cena con el fin de hallar la clave para cambiar el mundo. Así habría aprovechado el intercambio de ideas, de experiencias para luego llevarlas a cabo.

Teniendo en cuenta ese fin, pensé en las personas a las que convocaría para dicha velada. No las recuerdo exactamente, pero venían a ser, más o menos... Mahatma Gandhi, Che Guevara, Martín Luther King, Hitler, Albert Einstein, Nelson Mandela, Napoleón Bonaparte… algo así.

Con la reunión pretendía: conseguir una lluvia de ideas, sacar las características comunes, las diferentes formas posibles y diferentes logros, conseguir un intercambio de experiencias... Yo les “pondría al día”, fundamentalmente en las posibilidades tecnológicas con las que contamos actualmente, para que pudieran pensar más allá de su contexto histórico, probablemente, la ausencia de barreras físicas les serviría para ver un mundo de posibilidades. La reunión de líderes tan indiscutibles como éstos sería un fuerte impulso para avanzar, para cambiar de rumbo, sus conclusiones ya serían todo un referente. Personajes como Hitler, estarían para tener presentes los errores a los que se puede llegar; para poder oír voces contrarias y saber cómo, sino vencerlas, al menos contrarrestarlas; para situarse ante escenarios especialmente hostiles...

¿Y para qué os cuento esto? Bueno, ¿y por qué no? Me parece que hay que hablar de lo que realmente nos importa, porque así adquirirá más importancia real, más visible, tendrá más posibilidades de ser objeto de nuestras acciones, no sólo se quedará en deseos, en pensamientos... creo que hay que atreverse a soñar despiert@s y a intentar realizar esos sueños. Si queréis, podéis plantearos el supuesto y auto-responderos o compartir aquí vuestra propuesta de velada.

Por mi parte, después de hacer esa reflexión, como me gustó, me pregunté cómo “atraería” esa posibilidad a la realidad, sabiendo que no podría contar con los personajes citados. La verdad es que no tengo respuesta, sé que para “encontrar” a dictadores y gente que sirviera para plantear posturas contrarias y demás, no habría problema, tendría dónde elegir, pero... ¿líderes actuales, pacifistas, que luchen por un mundo mejor? Por suerte aún contamos con Mandela, reconocido mundialmente, pero... ¿a quién más meteríais en esa lista?

De todas formas, aunque tuviéramos que bajar un poco el listón o contar con otro tipo de líderes, que puede que sea algo inherente a nuestro contexto histórico... ¿qué os parece la idea? ¿no estaría bien contar con una especie de “Consejo de sabios” a nivel mundial que ejercieran un liderazgo que marcase ese cambio de rumbo? ¿para vosotr@s sí que existe? ¿cuál propondríais? ¿qué “grupo” os merece esa consideración? No es tan disparatada la idea, pues hoy por hoy contamos con una especie de “Consejo”, que no posee ningún liderazgo “moral”, un “Consejo” que no ha sido constituido como expresión de la voluntad popular, pero que realmente es el que marca nuestro rumbo. Seguro que estáis de acuerdo con esto, lo único que no sé si lo llamaríais G-7, G-8, G-20, Club Bilderberg...

Hablemos de lo realmente importante, de nuevo os animo a que dejéis vuestros comentarios y os invito a que volváis a visitar el blog en breve.

Un saludo!